sábado, 12 de diciembre de 2009

BROKEN, BEAT & SCARRED

CUERPOS EX – PUESTOS. PRÁCTICAS DE DUELO (PRIMERAS APROXIMACIONES)
Ileana Diéguez Caballero
Facultad de Artes. Universidad Nacional de Colombia. Bogotá. 2009

(Esta atractiva aproximación es un diálogo con libros como “Matar, rematar y contramatar”, de María Victoria Uribe; “Huesos en el desierto” y “El hombre sin cabeza”, de Sergio González Rodríguez; y “Cuerpo gramatical”, de José Alejandro Restrepo; entre muchos otros, que se acercan al tema de la violencia desde la antropología, la sociología y sobre todo el arte, pretendiendo explicar, hasta donde los tentáculos alcancen, ese fenómeno que, mirando a Colombia, parece no descansar, y seguro no lo hará: “Trabajar, blablabla y blablabla…)

I. MY APOCALYPSE

La lujuria y el desacato. La particular forma de apropiarse de lo(s) otro(s). El poder conferido tras la máscara, el apodo o el anonimato parcial –siempre sabrán lo que hicieron-. El cerco a cronómetro. La realidad irreal como el juego sobre una mesa. Estadísticas y nada más. O alguna cosa colada por ahí: un resentimiento, un trabajo, el odio en estado puro, el coágulo que lo contiene todo un milisegundo antes de estallar. Y todo como si transcurriera mientras parpadea alguien en la soledad de una fosa perdida y olvidada, sostenida por las fibras de un lapicero barato en una agenda que espera a por mejores luces.

II. ALL NIGHTMARE LONG

Es extraña la manera en que se divisa el teatro desde esta propuesta. El cuerpo como elemento para recordar y guiar el recuerdo a través de la laguna Catarsis a la otra orilla y, sin olvidar, si permear la constitución del duelo en un momento vivible. “Desahogarse, sacar todo el dolor, dar nombres incluso”, en un contexto terrible y penoso en el que los victimarios, si dejan mostrar los fragmentos del cadáver, impiden el derramamiento de las lágrimas como forma extendida de su práctica ritual de asesinatos sistemáticamente consolidados. “Le tocó buscar una bandeja para recoger a su padre”, o “Exigimos la posibilidad de velar a nuestro muertos”.

III. THAT WAS JUST YOUR LIFE

Lo fractal oficial, “Colombia no está lista para conocer la verdad”, contrasta con esa verdadera realidad, la de la “cadena interminable de dolores sin duelo”, en palabras de Jesús Abad Colorado, o “lo que nos hace falta es una memoria del dolor”, según Doris Salcedo, pero que dañaría las estadísticas de “uno de los países más felices” o la que detenta una bandera muy bien lavada con la palabra pasión en el medio, pervirtiéndola y extrayéndola de su contexto natural.

IV. THE UNFORGIVEN III

El perdón correrá por cuenta y riesgo de las víctimas, de lo que de ellas se rescata.
La práctica tan extendida en todos los niveles de esta Puta Patria: Hágalo Sumercé Misma, porque el Conflicto ha Desaparecido, Gracias a la labor incansable de este Gobierno.
La ausencia total de todo lo posible por rescatar.
Tomar tumbas anónimas para apadrinarlas bajo nombres reemplazados y dictarles peticiones.
La sed por la compañía.
La vulnerabilidad.
La agnición como el comienzo del final de una línea.

V. THE JUDAS KISS


La muerte por pena moral de algunos de los familiares de las víctimas de la masacre de Trujillo, Valle, Colombia.
“No hay proceso de reparación sin definición de las responsabilidades. Para que haya reparación tiene que haber la posibilidad de que la gente se exprese”.
Romper. Incluso la puesta tradicional del teatro.
Creer en el valor de la palabra para recuperarla y tejer la memoria para dejarla ahí, al alcance de todas las personas.
La frontera de un umbral.
El conjunto de afectados.
“La idea sacrificial de la memoria: el sacrificio implícito en el acto de recordar y de obligar a olvidar”.
País de extremos: “(..) el arte logre convertir al espectador en testigo del dolor de los otros”.
País de(s)troz(ad)os.
El amparo bajo el mismo régimen.
La obligación de obligar.

VI. THE DAY THAT NEVER COMES

“En lugar de la muerte del padre, el gran tema hamletiano desarrollado por Lacan, la problemática se ha desplazado en los tiempos actuales al trauma por la muerte del hijo”
(p. 38)

VII. SUICIDE & REDEMPTION

“Sin embargo, más que un trabajo de duelo se trata de un acto sacrificial, un ofrecimiento del cuerpo para alojar de manera permanente el dolor, internalizado, corporizado para siempre, nunca superado ni desplazado, como pensaba Freud, a otro objeto del deseo.”

La ruina eterna fractal que no permitirá presenciar el siguiente amanecer, ahora que los ríos –la mayoría hablados- empezarán a ser escuchados: cada roca tendrá algo para decir.

1 comentario:

Horgen M'Intosh dijo...

Publicado originalmente en "El Cotidiano", en la columna "Lector Ritual