Musica De La Roca

EXTREMITY RETAINED
Notes from the Death Metal Underground

Jason Netherton
Handshake, inc. London, Ontario, Canada. 2014. 477 pp 

 https://handshakeinc.bandcamp.com/album/extremity-retained

La primera banda gringa de Death Metal en tocar en Europa fue Immolation, que viajaron de vacaciones y fueron invitados a subirse a tocar una canción en París, en un toque de Tankard con Massacra, en 1988.
Immolation viajaron, en parte, para conocer a Mick de Napalm Death y a Barney de Benediction, por lo que al cruzar favores, llevaron a que Napalm Death tocase por primera vez en NYC el 18 de noviembre de 1989.
King Fowley, de Deceased, cuenta que le parecía mal que las bandas vendiesen sus demos hasta a 7 dólares con solo dos canciones en todo el K7, así que cuando sacaron el "The evil side of religion" decidieron intercambiarlo por cualquier vaina que le enviasen a cambio. King Fowley, así, fue la primera persona en Estados Unidos en tener una camiseta de Napalm Death enviada directamente por Mick desde Inglaterra.
Matt Olivo, de Repulsion, confiesa la calma que sentían cuando empezaron a tocar música extremadamente agresiva
Lo que más intrigaba a Dan Swanö era grabar la canción que acababa de componer
Cuando Tomas Skogsberg, desde Sunlight Studios, y fanático de The Beatles, oía a las bandas que querían que sus guitarras sonaran como sierras y él les respondía, ah, OK
Chris Barnes, con Leviathan, abriéndole a Dark Angel, en el tour del "Leave scars" ante 400 personas en un local como para 150
Alex Oquendo y los tres números de Necrometal, junto a Bvll Metal, y la pregunta que queda flotando sobre si hubiese ido a tocar a Europa para promocionar el "Reqviem"
Kam Lee recordando que leyó en un demo temprano de Hellhammer la frase: "Somos Death Metal" del puño y pulso del mismísimo Tom G Warrior
Para Terry Butler, el Thrash no es que estuviese tan peye, pero no soportaba que fuese algo alegre y sus ritmos un tanto danceables
'Corpsegrinder' dice que lo primero de Death Metal que oyó fueron los demos de Morbid Angel, Amon y Cannibal Corpse
Max Ward, de Plutocracy, fue el que corrigió a los por entonces niños de Exhumed al aclararles que lo que tocaban era Grindcore y no Death Metal como era lo que creían estar haciendo
Markus Staiger, de Nuclear Blast, dejando quedar a Mitch Harris un mes en la casa de su mamá porque el guitarrista, ya de palabra de Napalm Death al no pertenecer a la banda todavía no podía formar parte del Grindcrusher Tour
Mark Grewe, de Morgoth diciendo que sabía que no viviría del Death Metal y 'Corpsegrinder' dejando a Corpsegrinder porque quería pasar el resto de su vida viviendo del Death Metal
Moyses Kolesne, de Krisiun, siguiendo las recomendaciones de Sepultura, enviando su demo de 1992, el The Plague, a cuanta posibilidad hubiese alrededor de todo el mundo

Incantation, Monstrosity, Amorphis, Solstice, Revenant, Burial, Exmortis, Baphomet, Unleashed, Death Strike, Vital Remains, Abomination, Demolition Hammer, False prophet, Corpsegrinder, Death, Master, Malevolent Creation, Exhumed, Goreaphobia, Alex Webster con  Travis Ryan en 1993, Mitch Harris en 1993, Max Cavalera con Nick Barker en Londres en 1989, Deceased, Derketa, MasaCre, Mantas, Grave, Beherit, Impaled Nazarene, Sentenced, Gorefest, Krabator, El "Satan´s revenge part II", Sanity, Immolation, Cannibal Corpse, Mutilation, Xecutioner

La forma en que Scott Hull, de Agoraphobic Nosebleed llega al nirvana del grind
La forma en que Phobia, en palabras de Shane McLachlan eran rechazados por los punkeros por no ser punks y por los metaleros por no ser metaleros
Travis Ryan se confiesa un cazador de autógrafos

Después del origen, que es el primer capítulo, se pasa a la expansión. Tiene un eslogan, por decirlo así: "All Death Is Local".
Me acordé de todas esas películas o series de TV que apelan a la distribución de formas hasta misteriosas en algunas ocasiones de la cepa de alguna enfermedad altamente contagiosa capaz de transformar al receptor humano en un par de minutos.
A veces no deja de ser recomendable recordar que todo sucedió bajo un mundo sin banderas conectadas a la red.
A veces, incluso, no deja de ser extraño cuando algunos protagonistas del coro llaman a su año, 1996 y no 1988

La gira de Death con Carcass
La gira de Sepultura con Obituary
Suffocation con Profanatica
Annie Bowman, que trabajaba en Rock and Roll Plus y era la encargada de traer a las bandas a Philadelphia
Tony Lazaro llamando a Glen Benton a su casa para un toque en NJ en la era "Legion"
Eric Jardin, de Necrotic Mutation, contando cómo Suffocation, Deicide e Internal Bleeding tocaban en Amqui
Andrés Padilla, chileno y fanzinero, diciendo que los fanzines son la voz del underground
Alex Emilio explica que el Ultra Metal inició en 1984 con Parabellum
Jari Laine, presto con el botón en mano para grabar canciones desde la radio
Kai Mertens, presto con el botón en mano para grabar canciones desde la radio
Mitch Harris respondiendo entrevistas a fanzines de Indonesia, Japón y Bulgaria y recibiendo cartas de Tommy, de The Accüsed y de Mille, de Kreator
Matt Harvey quejándose de la sobresaturación de las bandas Thrash
Paul Ryan contando como podría ver a Cannibal Corpse, Gorguts, Corrosion Of Conformity, Bad Brains, pero la que le voló la cabeza, definitivamente, fue Bolt Thrower
Kai Mertens, recordando el concierto recién tumbado el muro de Berlín, de Kreator, Coroner, Sabbat y Tankard
Bruno Kovarík, contando como debían cambiar las letras de Krabathor, ante el comité que, en Checoslovaquia, decidía si una banda tenía derecho a presentarse o no en tal era comunista
Dead Horse, de Texas
Skinless, que son de Albany y todo les quedaba tan cerca: NYC, Boston, Montréal, Philadelphia
Aggressor, de España, con el demo "Brutal aggression", de 1988

Cuando no tomaban el Metal en serio y lo grababan mal o muy mal o lo grababan bajo los efectos de la burla y todo el tiempo esa frase que traducida a un contexto similarmente actual, se oiría así: "¿Y estos tipos qué putas hacen?"
Anders Schultz, de Unleashed, lo dice mejor: "No éramos más que chinos tomatrago que tocaban algo que llamaban Death Metal"
Kam Lee es el que dice que los demos eran la más confiable manera de atender una banda, y sigo creyendo lo mismo
El "Scream Bloody Gore"
El "None So Vile"
El "Human Waste"
El "Consuming Impulse"
El "The Ultimate Incantation"
El "Imperial Doom"
El "Considered Dead"
El "World Downfall"
El "Asphyx"
El "Dreaming With The Dead"
El "Exterminate"
El "Gallery Of Suicide"
El "City Beneath The Surface"
El "Slowly We Rot"
El "From Beyond"
El "Eaten back To Life"
El "Once Upon The Cross"
El "Domination"
El "Harmony Corruption"
El "Spiritual Healing"
El "Retribution"
El "Screams Of Anguish"
El "Slumber Of Sullen Eyes"
El "Shadows Of The Past"
El "Nesphite"
El "Dances From Left"
El "The Karelian Isthmus"
El "Member Of Immortal Damnation"
El "Dawn Of Possession"
El "A Shedding Of Skin"
El "Cursed"
El "False"
El "Like An Everflowing Stream"
El "Gardens Of Grief"
El "Dark Recollections"
El "Into The Grave"
El "Left Hand Path"
El "Orchid"
El "Resurrection Through Carnage"
El "The Somberlain"
El "Purgatory Afterglow"
Erik Rutan agradeciendo el haber alcanzado a saborear las mieles de lo análogo
La puerta que abrió el "Leprosy" para que las bandas fueran guiadas a la Morrisound
Scott Hull quejándose de la hiperproducción de lo actual que hace que todo suene tan popfecto
La tristeza de Alex cuando tuvo en sus manos el "Eaten Back To Life" y supo que la era del vinilo acababa de suceder
John Gallagher explicando que fue a causa de los hiperbateristas que los guitarristas tuvieron que empezar a buscar salidas más complejas alcanzando las infernales llanuras de ese estado de aburrición magnética llamado Technical Death Metal

Acababa de pasear por el capítulo dedicado a las grabaciones, que denominé el capítulo de la Morrisound.
Siendo antes que nada un fanático testigo de las bandas pesadas, he tenido una multitud de discusiones porque los procesos grabacionales me interesan más bien poco. Así que el siguiente capítulo, el de los conciertos y las giras, me llevaba a recordar la pregunta exactamente igual que Carolina Velasco hizo a las bandas para su libro "Tour Vértigo". Y hay algo que me lleva a pensar un poco las cosas. Si bien la distancia cultural es de casi ciento cincuenta años entre Estados Unidos y Colombia, todas las bandas empezaron siendo bisoñas, a no pocas engañaron, muchas giraron bajo el amparo de la diversión de estar en sus primeras giras sin un puto céntimo de dólar en el bolsillo, y así como ese muchacho de Australia creía que cada toque de Death Metal en los Estados Unidos era de decenas de miles de asistentes, al llegar a tierra gringa descubre que apenas van cien cuando es mucho y se empieza a preguntar por quién fue quien originó tal engaño.
Únicamente para constancia personal, dejaré dicho que nunca antes, en muchísimos años, me había reído tantísimo leyendo algo así.

El capítulo final, "Then, now, and beyond" es una pregunta sobre la manera en que los músicos, distribuidores, periodistas, organizadores de festivales y productores se sienten en 2014, quizás un par de años antes, respecto a finales de los 80's inicios de los 90's.
Por supuesto, está el cambio a la era de internet, para muchas personas fue el fin de lo subterráneo, pero para muchos otros el cambio es algo tan constante como natural y sería estúpido luchar contra ello.

La impresión absoluta, a lo largo del extenso libro, es la belleza de, desde una esquina muy alejada, estar ahí, haber estado ahí, sentir haber estado ahí.
Y podría empezar a enlistar los recuerdos de los conciertos de las bandas practicantes que aparecen en el jodido libro, pero me quedo mejor con el buso de Decrepit Birth que Terrance Hobbs tenía esa mañana en El Dorado justo cuando se disponían a viajar a Santiago para el concierto de la noche siguiente.
La historia, lo sé, es una forma exagerada de la narrativa misma, y desde allá ,de ella, es el deber revisar para acondicionar los gastos, a medida que ahora sí que es cierto, el tiempo nos lleva el impulso de la ventaja para aprovechar cada fragmento de nuclear muerte en medio del delirio sónico del derrumbe instantáneo del diario vivir