SIN TAPUJOS
Víctor Raúl Jaramillo
La familia del mundo. Medellín. 2015 -año de la justicia y el infinito excitado-. 25 pp
Este pequeño elemento se conforma de lo que llamé tres charlas que si bien no fueron escritos para precisamente ser dictadas sí me ayudan a entender una función endiabladamente poética en medio del descubrimiento de unas reglas del juego que habían quedado veladas hasta un instante mínimo gracias a mi estupidez
"Despierto desde tu grito" (carta abierta a Medellín); "Busca tu luz sin apagar las demás" (prédica de un filósofo metalero) y "Sobre interrogar y responder con miras a una cultura de siglo XXI" (reescritura después del salto)
Hay tanto todavía por descubrir en Víctor Raúl, sobre todo desde esa nueva formación que lo amplia a "Filósofo, músico, poeta" conteniendo tanto en todo y tan poquito pero tan hondo... el brillo y su misma fuente de luz....
No creo que haya algo que buscar, quizás sí se tenga que porpagar una especial clase de lucha, ignoro desde dónde o cómo, pero si bien desde los 90's la voz autorizada de los ecólogos había sido la de anunciar, si se desea o anhela, ahora mismo, su voz ha de trascender a un accionar que ha de romper moldes para adecuarse desde una cultura esférica en la zona más alta del condominio
Ya hay muchas personas, y como dice él mismo en una publicación reciente desde su FB: "Raza despreciable"
De aquellos erotómanos misántropos aguerridos genios ermitaños será el abandono terrenal para poder beneficiar al planeta a modo de paraíso acostumbrado a devorarse, naturlamente, a sí mismo
Medellín, que bien puede ser cualquier lugar, donde la solidaridad no ha hecho más que ser trastabillada, para no ir a dañar el común acuerdo del negocio, lo vulgar, la herencia heredada, ese cambio circunstancial para poder seguir abriendo el camino al amor desde un amor mismo del que se desconoce toda razón humana plausible de dar en el blanco del foco oscuro
una madre que sólo cosecha tumbas
mi pequeña putica
Nada que pueda salir de la indisoluble formación geológica de caracter emocional como lo es el fallecimiento desde el mero placer, con todo el dolor que cada quien pueda alcanzar a soportar
Y del delirio del desarrollo que quede lam entira, con más gana que cualquiera: deja ver tu rostro profano y lleno de lepra. No me vengas con palmaditas a la espalda, no me mires con pesar para conciliar tu traición
¡Mentirosos!
Si se llegan a quitar el antifaz igualmente tendrán el de abajo por doquier ya listo para empuñar la palabra del engaño, la tecnificación del control absoluto, la verdad que los nazis hicieron para no masacrar a los judíos sino para ponerlos a trabajar para que para ellos sea la libertad, la más cruenta lucha del poder a favor del poder, ese momento final cuando el general otorga el mar a los gringos que se lo llevan en cubículos dejando el desierto a plenitud, ¿cómo tolerar aquí al diferente que es el único que tiene voz? ¿y su voz es la verdad de la autodestrucción? ¿cómo cumplir a cabalidad neustro destino de la nada?
enfermedad mental así es como es llamada la vida misma
Sin tanta gente deberíamos volver todo una carretera gigantesca para extraer el petróleo que nos dará ciertas regalías, nuestros hijos de expresidentes serán socios de las empresas extractoras como tal, ser pobre es pagar impuestos
Una fuerza que debe abrirse camino, refiriéndose a la aspiración a la sabiduría
¿Pero cómo asistir a la vida?
La lucha que se avecina, cuando los conquistadores ya estamos entre nosotros
Es divertido que se anunciaba el s XX como el más horrendo de cuantos haya existido la humanidad, pero se decía que el XXI sería todavía más infrahumano, con las nuevas tecnologías por un lado, y bajo el auspicio pavimentado y patrocinado por la multinacional de turno que quede en pie tras la lucha de robots; la conspiración para el nuevo mapa geopolítico que ya no sabré de qué manera entender, pero que tendrá que ver con la sed, Blood thirsty blues, de Victoria Spivey, por ejemplo
Y al mismo tiempo, eso sobre lo que se edificó la vida propia: sin el ánimo de transmitir; aprendiendo a no tener la razón; pero al odiar así de tal forma la vida el odio sobre lo humano predomina para combatir ilegalmente de forma contraria a lo social lo que ha de ser justamente un ecosistema donde sobre lo humano
Vuelvo a Victoria: este sangrar que aquí se denuncia pero cuyo actual sistema de respuesta y adorno hace imposible verificar si sí se murió o ya no
El camino siempre está haciéndose y es cosa singular
Cada cambio se ajusta a su lugar
de su desquiciada forma de tener sin ser que es aquello contra lo que se ha de volver a ajustar el cambio de sentido absoluto
Lo dijo el ex alcalde: No es el carbón ni el petróleo, es el agua, ¡estúpido!
El Fracking ya se empezó en el César, donde no hay agua, ¡pero hay manipulación petrolera para que al abrir los pozos y regar el producto se llegue a la conclusión de que hace falta agua para consumo humano!
¡Repitamos los alimentos en las manos de los niñitos para la foto!
Quizá sea utópico, pero necesario como contestación a nuestro inquietarnos por lo viviente en esta cultura caósmica de s XXI
Y Víctor culmina con el accionar: Hagámoslo
porque ya no queda (de) otra manera vivir
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