PEDRO PÁRAMO Y EL LLANO EN LLAMAS
Juan Rulfo
Planeta. Barcelona. Junio de 1990. 239 pp
https://grotesquedeity.bandcamp.com/track/consumed-in-the-desolation
Realmente no sabía que escribir del libro. Curiosamente Grotesque Deity son de México. Había pensado en el rastro fantasma de los 43 estudiantes de Ayotzinapa. Quería, había dicho, leer el libro desde el rastro de los fantasmas. Quería, también lo había dicho, leer el libro de crg que, acá en Bogotá, es imposible de conseguir así fácil como entrar a una librería. Y quería, aunque esa edición es tan especial para mí, subrayar con colores el rastro que quería hallar en el texto. Ahora estoy oyendo el "The prophecy in the entrails" de Defleshed And Gutted. Debo permitirme decir que esa actualidad latinoamericana de la obra de Rulfo es muy dolorosa. Quizás estaba un tanto agobiado por los informes de Memoria Histórica y tanta vaina que todavía queda por sanar. Quizás, así como me pasa con TWD, me urgue, más que la serie en sí, tan tonta y despiadada, un documental que cuente el apocalipsis zombie y ya. Creo que no voy a hacer pausas. Tengo todavía el efecto de la muerte de #Micaela, en Argentina y de Claudia Giovanna, en Bogotá. También ese extraño atentado de que fue víctima Paola Noreña. Le dice, pues ella estaba por morirse y yo en un plan de prometerlo todo. Como que se promete a la mamá lo mismo que a la pareja. Como que ese "Madre no hay sino una" es como cuando le dicen 'mami' a la pareja. Como cuando dicen que ven a la mamá como a una virgen, a una santa, como que el internal del que todos venimos fue a expensas de probetas. El siguiente punto del que toca empezar a hablar es el olvido y es a lo que más anhelo le tengo, como persona humana en un mundo cada vez más despiadado en egos también y ansías de mantener el perfil del reconocimiento famoso en alto. Creo que quiero que me olviden, ese es mi mayor deseo. Algo así decía Céline, lo de pasar desapercibido, es parecido. Por eso me niego a tener hijos. Pero no pensé cumplir mi promesa. Hasta que ahora pronto comencé a llenarme de sueños, a darle vuelo a las ilusiones. ¿Esa será la manía de morirse? Llenarse de un gozo que no aprendimos a sentir en el cuerpo vivo? Mi señor padre acaba de informarme que el último sobreviviente de la familia de mis abuelos acaba de fallecer a los 94 años de edad. Supongo que está ya muerto cuando pasa a formar parte de esa esperanza sumerguida. Sí fuese un brujo, nuestro fvtvrv lo denominaría un horizonte gris como para dejar la cosa en empate. Casi como esa esperanza que hay en alguna parte, pero no paran osotros, los latinos (?) El rencor vivo que somos como raza conquistada y en penumbras todavía. Ni chicha ni limoná. Cuando le muestra toda la tierra que es de Páramo, es inevitable pensar en todas las tierras que se robaron los paras y que fueron autenticadas por malditos políticos y que tienen en ascuas a tantísimos restituyentes de esas tierras que no tienen un solo nombre y sí mucha sangre y huesos en pos de sí. Y la sospecha. Que no lo habitara nadie, Abandonado. Murió hace muchos años. Como que empeiza el terror ya. Como que más bien pisamos un territorio continental donde el Terror no se va jamás. El pueblo empieza a vivir de noche, como en Chihiro. Todo consiste en morir, Dios mediante, cuando uno quiera y no cuando Él lo disponga. Y ahí es cuando ya él se entrega. La cara transparente de Eduviges, las manos marchitas, sin ojos, el vestido antiguo, e medallón que dice Refugio de pecadores. Mi teoría de los feminicidios es que las mamás odian a escondidas a sus hijos, y por algún sentido desconocido, ellos se enteran, y como son hombres inmaduros, incompletos, niños de traído, cuando buscan a una pareja bsucan el amor de su mamá que no tuvieron, y cuando no es su mamá la que está frente a ellos, y sus parejas no son vírgenes de pureza que es lo que esperan de su madre, pues despiertan un instinto pasivo que desea vengar ese odio que sus mamás reales les inculcaron desde la concepción, porque les jodieron la vida como mujeres para ser mamás, obligadas o antes de tiempo. No se te olvide cerrar la puerta cuando te vayas, qués como lo que canta Kim Althea en "JC" que me recuerda a una persona que queiro muchísimo y que murió y que aún la lloro, la única que todavía lloro. Estamos hablando de muertos mucho, ¿no cierto? ¿A usted quién se le ha meurto que le duela así de duro? Otra más de las definiciones para latinos: Hay esperanza para nosotros, contra neustro pesar. Por ejemplo esa tapiada del cuarto donde ahorcaron a Toribio Aldrete, para que no tuviera reposo. Después es cuando dicen que la familia de Páramo absorbió todo de todos, y por eso condujeron al pueblo a la ruina. Lo que nos pasa ahora con el escaso verde que queda, que es para que las familias se aposenten y se hagan las que son familias, aunque no son ni mierda las hijueputas irresponsables. Al menos cuenta cuando abandonaban a las mujeres y no cuando las matabanentre tanta crisis machista de no saber ya cómo no ser machos y caminar a la inversa. Muertos de pavor ante el nuevo mundo. Impávidos. Ya de salida. Su ofuscación por güevonadas que son ciertamente tan trascendentales como el advenevir del género. Esa situación de los multiversos. ¿Cómo será sentir eso desde la física teórica? Voces que envían mensajes de ayuda, mas no de advertencia. Me imaginaría gente más alegre. Pero cómo la felicidad desde la colonización. No reconocemos como humanos a quienes no son nuestros pares de estrato. Mejor así. Mejor... Hay razas que saben a desdicha. Hay países también. Y elementos y constituciones, y gobernantes. El ADN del olvido. Es lunes y todavía no se entiende cómo se fraguó esa maldición de la violencia que ahora denominan micromachismo en serie. El paramilitarismo nunca se disolverá mientras todavía persista esa antigua idea de la genealogía ideológica. ¡Estúpidos! Si no es para mí no es para naiden. Tal vez la débil maldición que ya se aguarda. Ya viene la Semana mayor. No habrá palabras para determinar la jerarquía. Todo lo nuestro, será también nuestro
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